¿El cliente siempre tiene la razón en el entrenamiento?
22 ago 2025
En el mundo casi siempre se dice que el cliente tiene la razón, pero en el entrenamiento esto no es realmente así. Permíteme explicártelo.
Es cierto que los entrenadores trabajamos para y por nuestros clientes o alumnos, y que sus objetivos son la punta de lanza de nuestros esfuerzos. Cuando un cliente acude a ti con la intención de ganar masa muscular, perder porcentaje de grasa, “definir” o “estilizar” (como lo quieras llamar), nuestra tarea es diseñar un programa y un sistema de entrenamiento que cumplan con ese objetivo.
La asimetría de conocimiento entre entrenador y alumno
El problema está en la base de sustentación de ese objetivo. En general, el entrenador se encuentra en una situación asimétrica con relación a su alumno en cuanto a la cantidad de conocimiento que este posee sobre entrenamiento físico, actividad física y salud en general. Por lo tanto, en muchas ocasiones el alumno plantea ciertas ideas erróneas a la hora de intentar alcanzar su objetivo.
Si ya trabajas como entrenador, seguramente te has encontrado con alumnos que, a veces, desean cosas que ponen en riesgo profundo su salud, o incluso pretenden ir más rápido que lo que la fisiología permite.
Si bien los objetivos del alumno son importantes, el entrenador también debe plantearse ciertos objetivos, que muchas veces resultan ser lo más relevante.
Caso práctico: el ejemplo de Cintia
Por ejemplo, pensemos en el caso hipotético de Cintia, que te dice: “quiero a toda costa perder porcentaje de grasa y ganar masa muscular”. Esos son sus dos objetivos, así de simple. Pero su entrenador, al comenzar a trabajar con ella, se da cuenta de que Cintia tiene una muy baja capacidad cardiovascular, cierta rigidez en la ejecución de los ejercicios debido a una falta profunda de flexibilidad estática y dinámica, muy bajos niveles de fuerza, y además presenta una gran inestabilidad en rodillas y caderas.
Entonces, ¿Qué debe hacer el entrenador? ¿Ir a toda costa por los objetivos de Cintia, o comenzar a construir un programa que, sin perder de vista sus metas, le permita primero ganar movilidad y rango articular, incrementar sus niveles de fuerza para lograr estabilidad en los miembros inferiores, mejorar su rendimiento cardiovascular y, en consecuencia, potenciar sus niveles de fuerza?

La verdadera misión del entrenamiento
Nuestra búsqueda como entrenadores debe ser siempre el mejoramiento de la calidad de vida de nuestros alumnos o clientes. A partir de ese mejoramiento y de una mayor capacidad funcional, podremos desencadenar el desarrollo de diferentes objetivos específicos, que muchas veces son precisamente aquellos que desean nuestros clientes.
Coordinador Académico de Gualda Training